Los acuerdos laborales están para cumplirlos, y CCOO somos exigentes al negociar y rigurosos para cumplir. A raíz de la crisis inmobiliaria de 2008 y durante muchos años, las entidades financieras vieron afectados sus márgenes, produciéndose una reconversión del sector, y en esas circunstancias, para preservar empleo y la viabilidad empresarial, la plantilla se ajustó el cinturón varias veces.

Las circunstancias actuales son muy diferentes, acumulamos años con beneficios récord, y tenemos una plantilla, que haciendo el mismo trabajo, con el mismo nivel y categoría profesional, tienen una remuneración diferente si procede de Bankia, o su contrato es posterior a abril del 2012.

Desde CCOO insistimos en lo que venimos diciendo: Es el momento de reconocer a toda la plantilla de la misma forma y equilibrar los salarios. Debe hacerse preferiblemente desde los marcos de la negociación colectiva, no desde políticas unilaterales e individuales, ni desde la judicialización.

Lejos quedan los años donde trabajar en CaixaBank suponía una mejora importante respecto al resto del sector y al Convenio Colectivo. Donde la juventud anhelaba entrar en esta empresa y acudían a las pruebas de acceso de forma masiva.

En sus manos está volver a ser esa entidad atractiva para la juventud, que retenga el talento y favorezca el relevo generacional, sobre todo ahora que en el Plan Estratégico se pretende incrementar la plantilla en 3.000 personas. Un momento clave que requiere activar unas relaciones laborales muy paradas los últimos años.